A ver si cuela.

jueves, 26 de febrero de 2009

Hoy hemos padecido un claro caso de un antiguo mal, el " a ver si cuela".
Mujer 35-40 años acompañada de su hija, unos 12 años la criatura. Vienen a ver si se les puede firmar un certificado para que la niña juegue al futbol, que se lo pide la federación. Estando yo en el mostrador del centro de salud, se lo preguntan a la administrativa.Entrometido que es uno. Comienzo a explicarle que lo unico que podemos hacer es el informe único de salud. Que lo único que podríamos afirmar es que hasta ahora por lo que se sabe de su hija no parece que tenga ninguna enfermedad y que la auscultación cardiopulmonar es normal (en el caso de que se la ausculte y así sea). Que es un desproposito que le pidan ese certificado, y que si la federacion quiere hacer las cosas bien que las envíen a un centro de medicina deportiva, le hagan una prueba de esfuerzo y que le den un certificado ellos. Tras escucharme, me pregunta: "¿cree que la pediatra me lo hará?", respondo: "no creo". Replica: "por probar, ya casi me toca". Camina hacia la puerta de la pediatra, en la puerta hay un cartel explicando que no se hacen certificados, que solo se hace el informe único de salud. Se lo lee, porque la veo. Entra en la consulta de la pediatra y .... se lo pide, obviamente la pediatra le informa de lo mismo, la mjer se enfada, dice una de mis frases favoritas: "yo pago la seguridad social" y se va enfadadísima. La pregunta es: "¿que la hacia sospechar que el desenlace iba a ser diferente?, ¿pensaba que por enfrentarse a la pediatra, esta ya cansada, cedería?,¿por que narices las federaciones no dejan de pedir gilipolleces?, ¿las muertes subitas en jugadores de futbol de elite son cero por hacer pruebas de esfurezo?, .., lo que quieren es un cabeza de turco. Simple y llanamente.
Pues "a ver si cuela" esto como entrada. Me han contagiado.

1 comentarios:

El tema de los informes y certificados me ha llevado a realizar mil escritos y a elaborar multitud de hojas informativas, para convencer de la necesidad de clarificación y para evitar malentendidos. Pero nada, cada cual sigue yendo por libre y yo sigo teniendo conflictos. Además, ni la PT10, ni los grupos antiburocracia, ni las mil y una comisiones formadas han conseguido hasta ahora que el político de turno que tiene la varita para que los distintos organismos, públicos y privados, soliciten lo pertinente y por la vía adecuada, actúen racional y responsablemente. En mi medio no hay criterios comunes: unos se niegan a certificar lo que no procede y otros estampan la firma en cualquier documento médico-legal, a la ligera. Próximamente tocaré este tema en mi propio blog, pues no dejo de darle vueltas y más vueltas. Un saludo desde Gallaecia.